Bodega Cristo del Humilladero
La bodega
Bodega que data de mediados del siglo pasado con una capacidad de almacenamiento de casi 1 millón de litros y donde principalmente se elaboran vinos provenientes de las variedades Garnacha y Albillo, aunque dispone de algunas parcelas de Syrah, Graciano, Tempranillo y Tinta de Toro.
Está en pleno proceso de reactivación de la bodega, seleccionando muy bien la vendimia y elaborando un vino donde, en depósitos de cemento, las uvas fermentan con un estricto control de temperaturas sin añadir aditivos que dañen el producto. Eso hace que sus caldos tengan un IPF superior al 70 % y por ello sean excelentes para la crianza y reserva.
Aunque pertenecen a la D.O. Vinos de Madrid se encuentran en las estribaciones de la Sierra de Gredos. Sus viñas ubicadas en terrenos graníticos ofrecen vinos con colores rojos brillantes, con alta graduación y sabores recios que combinan con cualquier tipo de alimento.
En la actualidad estos vinos se exportan a tierras lejanas entre las que destacan EE.UU, Finlandia y Japón. Contando con calificaciones de 90-91 en la guía Parker (Agrícola de Cadalso, Granito del Cadalso o Curvas de Gredos son un claro ejemplo).
Nueva apertura: ¡Entretinajas!
Recientemente ha abierto en la propia bodega el comedor Entretinajas (25-30 personas). Ofrece menús personalizados para grupos de personas que visitan la Bodega Cristo del Humilladero (mínimo 10 personas). Está sujeto a disponibilidad y con previa reserva escribiendo a bodegacadalso@gmail.com
Variedad de uva
Garnacha tinta
Garnacha tinta
La Garnacha Tinta es vigorosa, de porte erguido y fértil; muy rústica, resistente a las condiciones adversas de cultivo, especialmente frente a la sequía, y es precisamente cuando sufre estrés hídrico cuando ofrece sus mejores cualidades. Prefiere los suelos calientes, secos y pobres, aquellos que contienen abundantes piedras o incluso fragmentos de roca madre.
Podría decirse que es de gran fortaleza ante las afecciones propias a las viñas, con una gran tolerancia al oídio; sin embargo es muy sensible al mildiu y a la botrytis. Se le suele practicar la poda corta, pero puede admitir la larga.
Aunque a finales del siglo XX se consideraba la elaboración de rosado como única aptitud de esta variedad, actualmente, y gracias a la aplicación de fermentaciones y maceraciones largas, así como regímenes de temperatura más reducidos que los practicados habitualmente, sus potenciales enológicos están amplificándose —de hecho, se elaboran con ella muchos de los vinos mejor valorados del mercado entre los que se encuentran los procedentes de la viña madrileña—.
Igualmente es usual encontrarla en la producción de crianzas mezclada con otras cepas —Cabernet Sauvignon, Graciano, Macabeo, Syrah, y Tempranillo—, a las que suele aportar acidez.
Tanto la tendencia que defiende un origen peninsular como aquella que reclama la isla de Cerdeña como lugar de nacimiento de la Garnacha, pudieran considerarse como válidas, especialmente desde un punto de vista histórico, en el que los vínculos entre ambas tierras han sido numerosos: la población sarda se habría asentado en el sur de la península en el 800 a.C., y la isla había sido colonia española de 1479 a 1720.
La familia de la Garnacha engloba diferentes variedades como son la Garnacha Tinta, la Garnacha Blanca, la Garnacha Peluda y la Garnacha Gris, así como otras tantas hibridaciones entra las que cabría citar la Garnacha Tintorera.
Las variedades comúnmente confundidas con la Garnacha Tinta son Alicante Henri Bouschet, Morrastel Bouschet, Plant Droit, Tempranillo, Vidadillo de Almocid.
Albillo real
Albillo real
Es poco vigorosa, de porte rastrero; muy resistente a las sequías y de gran adaptabilidad a suelos arenosos. Aunque también lo es a las afecciones propias a las viníferas —especialmente al oídio—, su precoz brotación la sensibiliza a las heladas primaverales, requiriendo podas largas que minimicen los daños y aumenten su baja productividad.
Es una variedad temprana, y su vendimia comienza en el mes de agosto, adelantándose a las restantes variedades cuya recolecta suele producirse a partir de septiembre. El pequeño tamaño de su racimo la convierte en una variedad de bajo rendimiento en prensa.
En un principio era más habitual encontrarla mezclada participando de tanto vinos tintos —a los que otorgaba cualidades aromáticas—, como rosados —tales como los de Cigalés de Catilla y León—, o incluso blancos —especialmente con Moscatel Grano Menudo—. Sin embargo, desde hace años se están produciendo monovarietales que han dejado al descubierto su enorme calidad.
Se emplea mayoritariamente para vino joven fermentado y criado en barrica, que presenta una tonalidad amarilla con matices dorados. Suelen ser vinos secos, con aromas florales y recuerdos amielados debido a los azúcares no fermentados; el retrogusto es levemente amargo.
Aunque existen referencias de vinos elaborados con esta variedad desde el siglo XVII, hasta mediado el XX, el Albillo Real se consumía principalmente como uva de mesa.
Algunos autores extranjeros la definen como uno de los secretos mejor guardados de España pues aunque se desconoce su origen es prácticamente imposible encontrarla fuera de nuestras fronteras. De hecho, la UCDavis (University of California) está realizando un ensayo de clonación y cultivo en el Valle de San Joaquín para comprobar su viabilidad en la zona.
Las variedades comúnmente confundidas con el Albillo Real son Albaranzeuli Bianco, Albarín Blanco, Albillo de Albacete, Albillo Mayor, Albillo Real de Extremadura, Alvariño, Cayetana Blanca, Chanin Blanc, Chasselas, Pardillo.
Syrah
Syrah
Aunque de ciclo vegetativo largo, su periodo de recolección es relativamente corto. Gusta de climatologías con abundantes horas de sol y temperaturas altas. Es sensible a la sequía y al viento —por lo que requiere de las prácticas del empalizamiento y la poda corta—.
La botritis es la principal enfermedad a la que suele ser vulnerable. Además, en 1993 comenzaron a verse en Francia los primeros síntomas de una afección exclusiva de esta variedad que se bautizaría como «Decaimiento de Syrah», y que pronto se extendió a los viñas de países como Argentina, España o Estados Unidos.
Suele proporcionar buenos resultados tanto en vinos jóvenes como de crianza en barrica de roble; se hacen distinguir por elevados índices alcohólicos y de acidez, el color carmín y aromas propios al cuero, el tabaco o el regaliz. Igualmente es habitual encontrarla elaborando vinos rosados.
En los coupages gusta ser buena compañera de la Cabernet Suvignon —en el que se combina el carácter herbáceo de ésta con el especiado de la Syrah—, de la Tempranillo —a la que aporta la acidez requerida—, o la Garnacha Tinta —permitiendo a la mezcla soportar un proceso de crianza—.
Persiste la leyenda popular que sitúa el origen de la variedad en la antigua Persia: desde siempre se ha especulado con la posibilidad de que la Syrah fue introducida por el pueblo fenicio alrededor del 600 a.C., o incluso por los cruzados entre 1095 y 1291 —lo cual resultaría bastante improbable ya que las Cruzadas concentraron sus designios fundamentalmente en Tierra Santa, y no fue nunca su intención llegar más allá en sus conquistas—.
Plinio «El Viejo» hablaba de la variedad «Syriaca» como una versión tinta de la Aminea, que decía crecía en Siria. Su descripción fue usada posteriormente para proponer un discurso en el que la Syriaca habría sido la antecesora de la Syrah.
La variedades más comúnmente confundidas con la Syrah son Dureza, Duraz, Mondeuse Noire, Persan, Serina e Zezë, Shesh i Zi.
Tempranillo · Tinto fino
Tempranillo · Tinto fino
De porte erguido, la baya de esta variedad se caracteriza por su gruesa piel. Debido a su sensibilidad a la sequía manifiesta —que provoca la defoliación de la cepa—, gusta de climas frescos y con cierta humedad. Los terrenos idóneos son los bien orientados a la iluminación y al viento, adaptándose mejor a las laderas que a los terrenos bajos o vaguadas.
Como su propio nombre indica, es de maduración temprana; dada su fertilidad, demanda la práctica de la poda de pulgares. Entre las afecciones propias a las viníferas, es altamente vulnerable al oídio y la excoriosis.
La variedad suele ser indicada para la elaboración de vinos tintos y rosados, tanto jóvenes como largamente envejecidos en barrica de roble. Aunque los resultados suelen ser dispares dependiendo del origen geográfico, los tintos con Tempranillo acostumbran ser de baja acidez, coloraciones cardenalicias y aromas característicos del regaliz, ciruela y frutos del bosque —zarzamora, grosella—.
Cuando se cultiva en altitudes más bajas disminuye la acidez, ya de por sí escasa, lo que mayormente es remediado a través de la mezcla con otras cepas tales como Cabernet Sauvignon, Garnacha Tinta, Garnacha Tintorera, Graciano, Merlot, Petit Verdot o Syrah.
En 1905, Frederic Theodore Bioletti intentó implantarla en California. Sin embargo, la naciente Ley Seca y el poco gusto de la variedad por climas calientes y secos, terminaron por provocar una fría recepción y frustrar las intenciones del viticultor italiano. Fue mucho más tarde, en la década de los 80, tras asentar las viñas en lugares montañosos más adecuados, cuando comenzaría a florecer el vino californiano basado en la Tempranillo.
En gran parte de las regiones vinícolas australianas —entre las que se incluyen las conocidas del Valle McLaren, las Colinas de Adelaida y la región Geographe—, y en más de sus 100 bodegas, se elaboran algunos de los vinos más valorados de la variedad del Tempranillo.
La variedades más comúnmente confundidas con la Tempranillo son Garnacha Tinta, Juan García, Moristel, Tempranillo Temprano.