Las Bodegas y Viñedos Peral, una de las más emblemáticas y antiguas de Madrid, acaba de finalizar las obras de rehabilitación y acondicionamiento en sus instalaciones tanto en las zonas de elaboración como en almacenaje, venta y degustación.
Con estos trabajos de mejoras se busca que el visitante disfrute de una experiencia diferente. Su mayor reclamo es su cueva centenaria, fechada en 1882, que cuenta con sus tinajas de barro originales y en la que se han habilitado espacios que antes estaban cerrados al público. Aunque se ha encontrado documentación de la bodega fechada en 1839, el edificio data del siglo XVI.
La bodega fue adquirida en el año 1953 por el abuelo del actual responsable de la misma, Jesús Peral, quien se ha convertido en la tercera generación familiar en la elaboración de vinos, y que ha apostado por el enoturismo formando parte de la Asociación Madrid Enoturismo.
La bodega es reconocida por la elaboración de sus vinos Sobremadre, única mención tradicional reconocida y protegida por la Unión Europea para la Denominación de Origen Vinos de Madrid. Su peculiaridad se basa en que su mosto fermenta con la uva estrujada –despalillada (madre)- y, una vez acabada la fermentación, permanece junto al vino un máximo de 6 meses con ausencia de trasiegos hasta el embotellado.
Bodegas y Viñedos Peral mejora sus instalaciones para ofrecer una experiencia única a su visitante.
10/12/2018